JOE LOVANO TRIO TAPESTRY – JAZZMADRID24
- Fecha: 10 de noviembre de 2024
- Lugar: Sala Guirau – Teatro Fernán Gómez (Madrid)
- Formación:
Joe Lovano (saxo tenor, tarogato y gongs)
Marilyn Crispell (piano)
Carmen Castaldi (batería y gongs)
“Garden of Expression”, de título muy sugerente, es el tema que da nombre al segundo álbum del trío Tapestry. Empiezo hablando de él. Son tres discos los grabados por ellos en el sello ECM, en 2019, 2021 y 2023. Lo he elegido como representativo del sonido que pudimos oír en JAZZMADRID24 a partir de la segunda mitad del concierto, cuando entran en acción los gongs, cada uno con un sonido distinto, muy atrayente. Primero tocados por Joe Lovano casi a la vez que tocaba el saxo y después, casi al final, por Carmen Castaldi, que nos recordó un tema del primer disco, titulado “Gong Episode”, un gran tema. Se levantó, abandonó la batería y pensé que se acababa el concierto pero no, continuó. Se acercó a ellos que estaban en el centro del escenario, al lado de Lovano, y comenzó a tocarlos con una baqueta de bola de peluche, con energía y suavidad. Fue muy interesante comparar los toques de un baterista y de un saxofonista. Los gongs fueron entonces protagonistas y sus golpes nos sacaron de las tonalidades más complejas que propusieron los tres músicos en la primera parte. Carmen Castaldi va con Lovano desde Viva Caruso (Blue Note, 2002), donde entendemos que Lovano rinde homenaje a su ascendencia italiana, como la de Castaldi, inspirándose en el gran tenor. Hacemos este breve inciso para subrayar la relación entre los dos y lo bien que estuvo el baterista, como en los discos, con discreción pero con presencia importante.
Por otra parte, el piano de Crispell contrapuntea las melodías siempre armoniosas que crea Lovano pero también se sincretiza con ellas de manera asombrosa. Es un saxofonista de marca, de sonido patentado, aterciopelado pero nada convencional, y Crispell parece conocerlo a la perfección. ¿Cómo es posible que un piano y un saxo suenen tan equilibrados, tan próximos en tantos pasajes? Llevan sus voces a una suerte de homogeneidad franca y delicada. Invito a escuchar este primer disco de Tapestry y explorar luego los duetos de la pianista con Anthony Braxton.
También hubo un “Piano/Drum Episode”. De fondo suenan los golpes precisos de batería que son casi siempre imprevisibles y no funcionan como base rítmica sino que entretejen otra capa necesaria, discreta y brillante a la vez. Entre los tres van tejiendo un tapiz musical (tapestry, en inglés). El nombre del grupo es muy atinado. Diría en verdad que tejen dos tapices sonoros distintos, pero de tonalidades cercanas, porque el hilo es el mismo, de seda nos parece, pero las puntadas son diferentes. Uno está modulado por la voz del saxo tenor, más romántica, más grave y más sedosa, y el otro por la del tarogato, con más requiebros, más aguda y más penetrante. Pero ambos instrumentos suenan bajo el mismo patrón. El piano y la batería se acomodan de la misma forma con los dos. En los desarrollos, suelen callar cuando entra el piano en pasajes más intelectuales, con la batería matizando golpes de bombo resonantes y menos platillos. Se alternaron las intervenciones para coincidir nuevamente siguiendo el hilo.
Trio Tapestry es un maravilloso grupo que propone una música de lirismo fluido, textura delicada e interacción inspirada en sonidos rodeados de silencios. La sensación que se adquiere es de una gran paz y sosiego. Siendo compleja, llega, te envuelve y te atrapa como si estuvieses transitando por un cuento de hadas. La sala Guirau es tan cómoda que agranda las sensaciones. Los silencios resuenan en ella. No exageramos. Diría que ese fondo de silencio que envuelve muy perceptiblemente esas notas que se van sucediendo con presencias y ausencias acompasadas de los instrumentos que manejan, es lo más definitorio de este jazz moderno y relajado, que no dulzón. Podríamos buscar algo que se asemeje en algunos trabajos con Paul Motian, pero la música que hace Tapestry escaparía a cualquier comparación. Sí nos atrevemos a decir que ECM Records es un sello adecuado para ella. Deben estar muy contentos en Múnich y suponemos que, como nosotros y su público, esperando la cuarta entrega en 2025.
El tercer disco lleva por título Our Daily Bread. Pensamos que en el concierto hubo temas de los tres. Las ocho composiciones que lo componen, todas firmadas por Joe Lovano, en la línea que hemos descrito, configuran un jazz muy melódico e intelectual, lleno de profunda armonía con los dos álbumes anteriores, pero distinto. Su título nos invoca de alguna manera la oración, el rezo. De nuevo han estado atinados, pues es la meditación lo que nos sugieren con su música. Hay tres temas destacados que pudimos oír: “Grace Notes”, el único en el que Lovano toca el tarogato y en el que el trío se empleó a fondo; “Power of Three”, en el que la potencia del trío, que siempre defendemos en el jazz, es nominada y reflejada; y “One for Charlie”, en el que Joe Lovano, mediante un solo de saxo tenor, interpreta un tema triste dedicado a la memoria de un amigo y compañero, Charlie Haden. El tema es corto y de una gran belleza. Se pudo disfrutar a Lovano, creador e intérprete, en estado puro, junto a sus dos apreciados Crispell y Castaldi.
Llegado el final del festival, como todos los años, no podemos evitar dar nuestra opinión sobre el que nos ha parecido el mejor concierto, elegido de entre los que hemos seguido, el que más nos ha gustado entre tantos magníficos conciertos. En esta edición nos ha resultado tan complicado como siempre por la gran calidad del programa en concordancia con nuestros gustos. Si esto puede servir para algo, decimos que distinguimos a este concierto con el número uno.
Sencillamente, fue un concierto sublime.
Texto y fotografías: © José Miguel Gutiérrez, 2024 / https://www.instagram.com/josemiguelgutierrez.lhl
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Información en unadeJAZZ
https://ecmrecords.com/product/trio-tapestry-joe-lovano-marilyn-crispell-carmen-castaldi/
